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HT en Pañales (III)

Written by Chinchi86

Con la entrada "en juego" de Amunet, Adic y Ción están abriendo su cerrado grupo de dos a una persona más, a la que aún no conocen del todo bien...
¿Qué pasará en este nuevo capítulo de esta serie de todos?

Capítulo 5: Todo por una apuesta.

La semana empezaba un tanto ajetreada para Adic. Acababa de perder su trabajo y el sueldo que recibía ahora como subsidio, dejaba (como siempre) bastante que desear. Empezó a buscar trabajo, pero nadie encuentra trabajo en un día.

Llegó a su casa un poco desanimado y entró al foro. En el foro estaba relajado y aún seguía hablando con Amunet por allí. Aunque también la veía en el Bar Tolo.

Al principio se pasaba de vez en cuando, pero ahora, cada vez se pasaba más a compartir unas risas con Nestea sumándose a Adic y Ción. En el bar ya la conocía la gente. Su presencia, aunque seguía sin pasar inadvertida, cada vez era más habitual.

Todos sabían que Adic había perdido el trabajo, pero nadie más que Ción conocía su situación actual.
-¿Pero tú estás loco? -preguntó Ción haciendo temblar la mesa con un puñetazo.
-Son cosas que pasan, amigo. -respondió Adic sonriendo relajadamente y haciendo gestos despreocupados a Ción con la mano para que se calmara.

Las cosas habían estado bastante calmadas por Hattrick últimamente y eso a Adic, le provocaba una extraña sensación en el estómago. Había perdido su trabajo y apenas llegaba a final de mes con el subsidio por desempleo.
-Es que has gastado tus últimos 2€ del mes en ese estúpido boleto de lotería.
Ción estaba levantando la voz más de lo habitual y todos miraban a la mesa extrañados preguntándose qué pasaba. Y proseguía alzando la voz.
-Qué vas a hacer ahora, encima has basado los números en tu equipo de Hattrick.
-No te preocupes tio -dijo Ción con seguridad en su rostro. - Tengo unos ahorros guardados en el banco por si pasaba algo como esto, aunque tengo todos los gastos del mes ya cubiertos y no quiero tocarlos a ser posible.
-Madre mía Adic - dijo Ción suspirando y por fin calmándose.- Creo que no ves cómo están las cosas con la crisis.
La noche llegó y miró las finanzas de su equipo donde él tenía millones y rio ante la paradójica situación. En esas, apareció un mensaje extraño de un antiguo compañero de grupo que seguía en ese mismo desde hacía 3 temporadas atrás que Adic lo dejó por ascensos.

El mensaje era bastante raro:

Topami
Estoy reformando el equipo y me gustaría probarlo contra el tuyo. Veo que vas camino de hacer algo grande y por eso quisiera medirme contra ti para ver si es viable.

La frustración que sentía por la pérdida de empleo, le hacía que no le interesase mucho la oferta, cuando normalmente siempre estaba dispuesto a colaborar. Mucho más cuando se trataba de un amigo y rival, no sólo de Hattrick sino de su misma ciudad con el que a veces compartía un Nestea en el Bar Tolo. Le respondió diciendo que no tenía nada que ganar y que no le interesaba.

Pero la respuesta de su amigo y antiguo rival le pareció algo tentador.

Topami
Entonces hagámoslo una apuesta. Eso sí, si pierdes, tendrás que pasearte por la calle en calzoncillos.
Ah y si ganas te pago el suporter un año

Adic le dio el visto bueno y Ción actuó de testigo de la apuesta en el Bar Tolo. Topami, que era el nick de ese extraño usuario, salió del bar.
-No me da buena espina. -dijo Ción con cara amarga.- Lo veo demasiado seguro y confiado, además que estás empezando a barbechar y sólo tienes la mitad del equipo.
-No te preocupes, -dijo Adic.- Tendré mi año de suporter mañana que es el partido.

La mañana llegó y el amistoso empezó a favor de Adic. 1 a 0. Adic estaba preocupado. El equipo que presentó era mucho más fuerte de lo que él esperaba, pero de momento estaba teniendo mucha suerte.

Al final de la primera mitad, el resultado se fue a 2-0 a favor de Adic, pero el pullback tempranero empezaba a hacer estragos en sus potentes ataques. Adic estaba pegado al ordenador y en el minuto 60 empezó la remontada visitante. En el minuto 65 llegó el empate a balón parado.

Los 25 minutos que quedaban se le estaban haciendo eternos. Adic rezaba para que el partido acabase ya con ese resultado de tablas y empezaba a respirar aliviado cuando el minuto 89 llegó.

No podía creer su mala fortuna, minuto 89 y 45 segundos GOL del equipo visitante y perdió la apuesta.

Al minuto de acabar el partido, su móvil empezó a sonar. Tras colgar se dirigió al Bar Tolo donde le esperaba un sonriente Topami y Ción estaba intentando contener la risa que se le empezaba a escapar.
-Ya te lo avisé. -Dijo Ción entre risas.
-Bueno, -cortó a Ción Topami- ya sabes lo que toca.
-Por supuesto. -Dijo Ción empezando a quitarse la camiseta con desgana. -Una apuesta es una apuesta y hay que cumplirlas.

Al final fue un espectáculo. Topami le dejó ponerse las zapatillas para que no se cortara los pies y menos mal, cuando llevaba 10 minutos andando por las calles seguido a 10 metros por varios amigos del Bar Tolo, la Policía Local le dio el alto y empezaron a correr detrás de él. Por suerte estaba en forma y tras adelantarse un poco a los policías, se escondió en el Bar Tolo y se vistió corriendo ante la risa socarrona de Topami y la mirada acusadora de Ción que parecía decir "te lo dije".

La tarde se escurría entre los dedos que tecleaban en los verdes foros y Adic la pasó hablando con Amunet, que aunque no había visto lo de la apuesta, se enteró. Fue algo bastante sonado entre los usuarios conocidos de la ciudad y especialmente del Bar Tolo.

Amunet se rió bastante al enterarse de lo sucedido y picaba a Adic con el tema. Adic ya estaba cansado de hablar de la apuesta, pero pese a estar ella en una división superior, se le ocurrió usar la idea que tanta vergüenza y habladurías le habían causado.

Adic
Ya que te gusta tanto el tema de la apuesta, por qué no hacemos tu y yo una

Amunet
Yo no voy a ir en ropa interior por ahí, ¡que lo sepas!

Adic se rió porque realmente no iban por ahí los tiros

Adic
Ja ja ja, me parto de risa... Sabes que no es eso.
Es algo mucho más simple. Si te gano, tenemos una cita.

Amunet
estoy en una división superior a la tuya y te saco más de 50 Hatstats...
¿Qué harás si te gano?

Adic no se lo pensó ni siquiera 5 segundos y respondió lo más rápido que pudo teclear.

Adic
Amunet
estoy en una división superior a la tuya y te saco más de 50 Hatstats...
¿Qué harás si te gano?

¡¡¡Lo que quieras!!!

La tarde se acercaba a su fin y el sorteo de la lotería estaba próximo a salir por la televisión, pero Adic estaba demasiado centrado esperando la respuesta de Amunet como para prestar atención a eso.

La respuesta tardó media hora en llegar.

Amunet
Adic
Amunet
estoy en una división superior a la tuya y te saco más de 50 Hatstats...
¿Qué harás si te gano?

¡¡¡Lo que quieras!!!

No lo olvides, puedo pedirte cualquier locura

Adic se rió y siguieron intercambiando mensajes durante varias horas. Lo que Amunet no sabía era que, no como en la vida real, Adic tenía una economía muy fuerte y podía reforzar el equipo de sobra para al menos igualar al equipo de Amunet y aún sobrarle bastantes millones de efectivo. Total, aún disponía de la mitad de un equipo que llegó a las semifinales de la copa de la pasada campaña.

La noche cayó y Adic se iba a ir a la cama cuando el boleto de lotería entró en su campo de visión. Lo recogió de la mesa, encendió la tele con algo de desidia y encendió el tele-texto. No lo podía creer y llamó a Ción.
-¿Qué pasa tio no sabes qué hora es?
-¡¡¡Macho no sabes lo que me ha pasado!!!
-No lo sé Adic, estaba durmiendo y ahora mismo casi me dejas sordo.
-Enciende la tele Ción
-¿Para qué?
-¡Que pongas la tele leches!
-Ya la he puesto ¿no será una tontería no?
-Pon el tele-texto y mira la Lotería
-¿Para qué, si no juego?
-Creo que me voy a repetir ¡Quieres ponerlo de una vez leches! -dijo Adic totalmente nervioso
-¿Ahora qué? ya la tengo puesta
-¡¿Qué números han salido?!
Tras decirle Ción los números, Adic gritó otra vez, no era un error de su pantalla ni imaginaciones suyas. ¡Le había tocado la lotería! y más de 2 millones de € que, recién desempleado, le venían en un momento mejor que nunca.

Cuatro días pasaron y Adic aprovechó parte del dinero (real) en convertirse en un empresario de bien y compró entre otras cosas el Bar Tolo, subiéndole el sueldo algo a los empleados que siempre se quejaban de los malos salarios, además de una monísima casa en las afueras.

En el mundo verde aprovechó muchos de sus ahorros para plantar un fuerte equipo. No estaba especialmente motivado tras perder, injustamente para él, en las semifinales de la copa la temporada anterior. No se reforzó por el espíritu competitivo de la liga o la copa, de la que ya estaba eliminado. Simplemente contrataba los mejores mercenarios que podía encontrar y a los que después, si era posible, pudiese sacarles algo de beneficio haciendo Day.

Nadie más que Ción se enteró de que había ganado la lotería, gracias a Hattrick, ni siquiera Amunet y aunque ahora, no cómo antes, el dueño del bar Tolo estaba más en el bar que antes, ya que prácticamente no salía de allí, los habituales del Bar no sabían nada del cambio de dueño.

El día del partido, que no podía considerarse nunca más un duelo amistoso, se acercaba y la tensión se marcaba en los mensajes que se cruzaban entre los dos contendientes. Cuando el partido llegó, Amunet se sorprendió del equipo que había salido a jugar contra ella. Eran jugadores totalmente diferentes y un equipo que, como en temporadas anteriores, podía luchar de tú a tú con cualquier equipo de élite de la Primera o II división.

Amunet
Tantas ganas tenías de tener una cita conmigo

le escribió tras el tercer tanto de Adic en la primera mitad.

Adic
Claro, aunque veo que tú también te has reforzado para el partido xD
Y válgame la redundancia... ¿Qué querías hacerme hacer? porque no saliste a perder

Escribió Adic con tono de guasa

Amunet
Aaah te vas a quedar con las ganas de saberlo... Me parece que me vas a arrollar.

El partido acabó y al final un 0 a 7 ondeaba en el marcador, tal vez demasiado abultado para las calificaciones de ambos, pero totalmente justo el signo del partido.